Ya en la última fase de la prueba semanal basada en España, los chicos de la 5º edición de Gran Hermano y Eneko, el participante español que realizó un intercambio con Soledad, tuvieron que encestar tomates en unas redes que sus compañeros llevaban en la cabeza.
En la prenda debían dividirse en duplas y embocar al menos seis verduras por turno para darla como superada. Florencia y Esteban, Sebastián y Andrea, Damián y Juan Emilio y Eneko y Celeste fueron las parejas que se alternaban en cada secuencia: en la primera parte uno arrojaba y el otro recibía y en la segunda al revés.
Como en cada prueba semanal, los integrantes del rality tuvieron que apostar un porcentaje basado en los minutos que tendrían luego para abastecerse en el supermecardo ubicado en el SUM. En este caso apostaron nuevamente el 90%, y como sobrepasaron con éxito esta última etapa, se les otorgaron 1 minuto 25 segundos para comprar en el minimercado.
Los encargados de entrar al super fueron Florencia y Esteban, este último por segunda vez consecutiva, y se dividieron los roles como de costumbre: la salteña se dedicó a recolectar los productos no percederos, mientras que el santafecino lo que era carne y artículos de freezer.
Cuando quedaban menos de 15 segundos, y la puerta ya comenzaba a descender, el novio de Eugenia agarró varios paquetes de chicles, pero a la vez tiró otros por lo que Gran Hermano determinó que fueran anulados.
Nos lo aporto La TV Misma, un blog que se afilio a Rewista Web
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